Guía y recomendaciones para viajar solo a Kandy
Confieso que nunca había oído hablar de Kandy hasta que empecé a preparar mi itinerario por Sri Lanka y si las expectativas ya eran elevadas…
¡Cuando llegué allí, esta ciudad me sorprendió para bien!
Hoy te hablo de la que es considerada como la capital sagrada y cultural de Sri Lanka.
| PLANIFICA TU VIAJE SOLO |
|---|
Comparador de vuelos – SKYSCANNER Comparador de alojamiento – BOOKING Buscador de transporte – OMIO y 12ASIA Tarjeta para viajes sin comisiones – REVOLUT y N26 Tarjeta Esim Internacional con 5% de descuento – HOLAFLY El mejor seguro de viajes en Español con 5% de descuento – IATI SEGUROS Tramitación de visados – IVISA Reclamación de vuelos con 7% de descuento con el código AHPLS7 – AIRHELP |
Cómo llegar a Kandy
Si viajas desde el Norte como yo, tienes buses que te llevarán de Dambulla a Kandy en aproximadamente 2 horas.
Si viajas desde el Sur del país, uno de los imprescindibles de cualquier viaje por Sri Lanka que se precie, es coger el tren de Ella a Kandy (te hablaré de él en mi siguiente artículo) que tarda unas 6-7 horas.
Qué ver en Kandy
Rodeada de verdes montañas, en el centro de Sri Lanka, se encuentra la ciudad sagrada de Kandy.
Esta ciudad fue el epicentro político y cultural del país desde el siglo XV hasta la colonización británica en 1815.
El Templo del Diente (Sri Dalada Maligawa)
Este templo es uno de los lugares más sagrados del planeta: en su interior se conserva una reliquia con el diente de Buda.
Por ese motivo, hoy es un lugar de peregrinación y la ciudad sagrada de Kandy ha sido nombrada Patrimonio de la Unesco por su importancia dentro de la religión budista.
La leyenda cuenta que el diente de Buda fue llevado a Sri Lanka en el siglo IV. Estuvo en varios lugares hasta que se construyó un templo en Kandy.
Sri Dalada Maligawa se construyó del siglo XVI y posee una elaborada decoración.
La entrada a este templo es de pago y en julio-agosto, se celebra el festival Esala Perahera, el único día en el año en las que se abren las puertas para ver la reliquia y en las se realizan grandes procesiones con elefantes y tambores.
El Lago de Kandy (Bogambara Lake)
Lo que más me llamó la atención nada más llegar a Kandy es que posee un precioso lago en su centro histórico.
Es un lugar lleno de paz.
Se trata de un lago artificial que fue creado en el siglo XIX por el último rey de la dinastía de Kandy. Formaba parte de los jardines del rey y en su centro se encuentra un pequeño santuario en el que se dice que meditaba la familia real.
Está junto al templo del Diento por lo que se consideran que sus aguas también son sagradas.
El Museo Nacional de Kandy
Justo detrás del Templo del Diente se encuentra este pequeño museo que fue construido por la administración colonial británica a principios del siglo XX.
En él podrás aprender muchas cosas sobre la historia, la cultura de Kandy y Sri Lanka.
Entre los objetos más destacados están las colecciones dedicadas al reino de Kandy y al budismo en Sri Lanka y por el mundo.
Una visita interesante, sin más, que apenas te llevará una hora. No se pueden tomar fotos en su interior.
El Cementerio Inglés
A un paso del museo nacional, como curiosidad, te encontrarás un antiguo cementerio inglés que data del siglo XIX.
Kandy fue la última capital real de Sri Lanka y tuvo un papel crucial durante la independencia del país. Allí quedaron enterraron los soldados británicos que lucharon durante el enfrentamiento.
El Old Royal Palace
Este palacio fue la última residencia de los reyes de Kandy.
Se encuentra actualmente en reformas y en su exterior se puede apreciar que combina elementos coloniales y tradicionales.
Aquí os dejo la página oficial para más información.
Los Miradores de Kandy
Súbete a un rickshaw / tuk-tuk y disfruta de las vistas a esta preciosa ciudad desde Arthur’s Seat View Point.
Siguiendo con la ascensión, al otro lado del lago, se encuentra el Buda gigante, una estatua de unos 30 metros de altura, una de las más grandes del país.
Desde ella tendrás también unas vistas espectaculares a Kandy.
El Centro Cultural de Kandy
La ciudad de Kandy siempre estuvo muy unida con la artesanía, el baile y las artes.
Esta región es famosa por haber preservados muchas de sus costumbres y bailes más tradicionales.
Por ese motivo, existen varios centros, especialmente diseñados para turistas, en el que puedes ver una pequeña muestra de ese patrimonio inmaterial.
Me recomendaron ir a al Kandyan Cultural Center, junto al lago. El espectáculo suele arrancar sobre la seis y dura aproximadamente una hora y media.
Destacan las máscaras tradicionales, los trajes y joyas. Algunos bailes sorprenden al incluir vasijas e incluso con fuego.
Se trata más de un espectáculo con intenciones didácticas que otra cosa.
El jardín botánico Peradeniya
Un poco más alejado del centro, a unos 6 km, se encuentra el jardín botánico de Peradeniya que merece mucho la pena en mi humilde opinión.
Dentro de sus invernaderos te encontrarás con variedades increíbles de orquídeas, podrás relajarte paseando junto a sus precioso lagos, pero personalmente lo que más me fascinó fueron las largas avenidas de palmeras y de árboles centenarios.
Originalmente era un parque real para el cultivo de especias y plantas medicinales, pero con la llegada de los británicos se convirtió en un jardín botánico para la investigación y conservación.
Eso, sí tómate tu tiempo porque, ¡Tiene una extensión de unas 60 hectáreas!
No hubo suerte aquel día, pero normalmente es posible encontrarse en él monos, coloridas aves… ¡y murciélagos gigantes!
Jardines de especias (Spice Garden)
Es algo que te encontrarás en todo Sri Lanka, pero en mi caso, como me gustó tanto Kandy, aproveché para visitar uno estando allí. Se trata de un visita también muy enfocada a los turistas, pero interesante.
Sri Lanka siempre ha tenido muchísima tradición cultivando especias de calidad ya que la isla era un lugar de paso en el comercio marítimo.
Hoy en día la canela, la pimienta, el clavo y la cúrcuma son una parte fundamental de la economía local.
Pero, ¡Ojo! No sólo se utilizan para cocinar, sino que también hay una amplia tradición en la medicina tradicional, también llamada ayurvédica (Incluso existen estudios oficiales de medicina natural)
En este tipo de centro de información, aprenderás algo de botánica y, de paso, podrás oler, tocar y probar (y comprar, si quieres) muchas de estas maravillas.
Una visita muy entretenida e incluso, si quieres, algunos de estos centros también ofrecen clases de cocina para aprender alguna receta esrilanquesa.
Fábricas de tés
Desde Kandy hasta Ella, te encontrarás enormes extensiones de campos de té, por lo tanto, es otra visita muy interesante para seguir entendiendo la cultura de Sri Lanka
En mi caso, me recomendaron visitar la Embilmeegama Tea Factory, una fábrica que fue fundada a finales del siglo XIX, ya que estaba muy cerca del jardín botánico y del jardín de las especias (así visité las tres cosas en el mismo día).
Como viajé en temporada baja en Sri Lanka, estuve sola durante la visita. La guía me estuvo explicando durante unos 30 minutos, un poco de la historia de la antigua Ceilán, de la introducción del té por parte de los británicos (siempre se había consumido más café en la isla hasta entonces) y del proceso de fabricación.
Se introdujeron variedades de India y China con mucho éxito hasta colocar el té de Sri Lanka en el mapa. En la actualidad, Sri Lanka es el tercer exportador de té del mundo.
Al final de la visita puedes probar las diferentes variedades que allí se comercializan (incluido en el precio de la entrada)
Además, la fábrica tiene una enorme tienda en la que podrás comprar todo tipos de tés.
Dónde dormir en Kandy
Los precios en Kandy son algo más elevados que en el resto de las ciudades de Sri Lanka y es que, al ser un lugar de peregrinación, la ciudad es muy turística.
Sin embargo, cuando estuve buscando alojamiento, me llamaron muchísimo la atención las excelentes reseñas de Hanthana Jungle View Holiday Home.
Esta encantadora casa de huéspedes tiene unas habitaciones y baños extremadamente amplios y es un lugar maravilloso para descansar porque está un poco apartada del centro histórico de Kandy.
Tal y como indica su nombre, la casa de dos plantas está rodeada de vegetación y la calidez de sus anfitriones es increíble.
Ofrecen unos desayunos (con la misma fruta de sus propios árboles frutales) y cenas caseras copiosas.
Tienen a un conductor de tuk-tuk de confianza que puede llevarte hasta todos los lugares turísticos por un módico precio.
Todo esto hizo que mi estancia en Kandy fuera aún más maravillosa.
