Guía y recomendaciones para viajar solo a Lagos

Esta guía te será muy útil si, al igual que yo, reniegas de los coches. ¿Es posible viajar por el Algarve sin coche?

Fácil, no es, pero aquí te van unas cuantas recomendaciones para disfrutar de Lagos y de sus alrededores, en esta increíble región portuguesa que es el Algarve.

Aquí tienes mis consejos de cosas que ver y hacer desde Lagos (no te pierdas las excursiones que también hacer desde allí) y también podrás encontrar en el blog mis recomendaciones desde Faro.

Mi viaje y recomendaciones para viajar solo a Oporto
Mi viaje y recomendaciones para viajar solo a Oporto
Guía y recomendaciones para viajar solo a Lisboa
Guía y recomendaciones para viajar solo a Lisboa

Cómo llegar a Lagos desde Lisboa



¿Cómo ir al Algarve desde Lisboa sin coche? Pues resulta muchísimo más fácil de lo que se cree, existen numerosos buses que comunican la capital con una de las regiones más turísticas de Portugal.

Tienes una gran red de buses de Rede Expresso y Flixbus (muy cómodos y con wifi) que cuestan alrededor de unos 20 euros. El trayecto durante unas 4 horas aproximadamente y hay bastante frecuencia por lo que puedes perfectamente reservar unos días antes.

En Lisboa salen de las estaciones de Oriente y Sete Ríos.

Buscador de billetes baratos Omio

OMIO: el buscador de transporte

Las mejores playas de Lagos



Está claro que si vas a la Algarve es por qué quieres playa, ¿no?

Al viajar sin coche por el Algarve, a veces es complicado llegar a ellas, así que aquí te recojo un primer día de paseo para ver sus playas más famosas.

Si te alojas en Lagos, las playas más populares se encuentran a las afueras, a unos 3 km, así que te recomiendo que tomes un bus desde el centro que vaya en dirección a Ponte da Piedade para empezar tu recorrido.

Faro Ponta da Piedade
Faro Ponta da Piedade

Ponta da Piedade son básicamente unos acantilados impresionantes de piedra caliza que se bañan en un agua turquesa increíble. Allí se encuentra un faro y es un lugar perfecto para ver puestas de sol y sacar fotos para Instagram.

A partir de ahí, teóricamente hay un sendero, que va todo lo largo de los acantilados, pero también hay numerosos carteles que te piden no acercarte demasiado al borde porque, al ser piedra caliza, ¡hay riesgo de desprendimiento! Obviamente, la mayoría de los turistas ignoran las advertencias.

Así, que, para evitar accidentes, mi recomendación, aunque no es muy agradable, es recorrer la carretera M536 ya que puedes acceder a través de ella a todos los aparcamientos y, por lo tanto, a todas playas colindantes.

Te encontrarás en el siguiente orden, la Playa dos Pineiros, la Playa do Camilo, la Playa Doña Ana, la Playa de Pinhao, y ya llegando de nuevo a Lagos, la Playa de los Estudiantes y la Playa da Batata.

Otras de las Playas que me recomendaron fueron la Playa de la Luz, la Playa de Porto Mós y la Playa de Canavial. Sólo puede ir a esta última (las otras dos están más alejadas) y la verdad es que me encantó. Hay un bus que salen desde Lagos que te dejan allí.

Finalmente, si cruzas la Marina de Lagos, te encuentras con más playas aún: tenemos la playa Duna (muy de la estación de tren de Lagos) y la enorme Meia Praia de una extensión enorme de más de 5 kilómetros.

¿Cuál es la mejor playa de Lagos? Pues personalmente, no sabría qué decirte porque personalmente me pareció que todas tienen su encanto dependiendo de cuál es tu plan, pero lo cierto es que las primeras mencionadas son muy impresionantes (de ahí que sean las más famosas) porque realmente se encuentran entre acantilados muy altos e impresionantes (hay que bajar un montón de escaleras para acceder a ellas). Si eres amante de los deportes náuticos, en cambio, te conviene más ir a Meia Praia. Si no tienes coche, las más convenientes sería la Playa da Batata o dos Estudantes.

El centro histórico de Lagos



Personalmente, me pareció que Faro tiene más encanto que Lagos, pero aún tiene unos cuantos puntos de interés.

Algunos de los puntos neurálgicos son la Plaza Gil Eanes, la Calle Infante de Sagres y la Plaza Luis de Camoes, unas calles principales comerciales y llenas de vida, tiendas y restaurantes.

También es muy popular la vista al mercado municipal de Lagos con sus puestos de frutas y verduras, carnes y pescados.

Entre sus edificios históricos destacan el Castillo de los Gobernadores (conocido también como el Castillo medieval de Lagos), su Puerta de Sao Gonçalo y los restos de su muralla medieval, el Fuerte da Ponte da Bandeira, la Iglesia de San Antonio, la Iglesia de Santa María de Lagos

Otras visitas interesantes son el Centro Cultural de Lagos (con exposiciones temporales y un auditorio) y el Museo del Mercado de Esclavos (en uno de los edificios más antiguos de la ciudad se encuentra este museo sobre la triste historia de los primeros esclavos africanos que trajeron a Europa).

Lagos es una ciudad extremadamente turística y posee también un puerto deportivo. Frente a la Avenida dos Descubrimentos, tras cruzar un puente elevadizo, nos encontremos con la Marina de Lagos donde encontraremos un réplica de la Caravela Boa Esperanza, una noria , varias empresas turísticas vendiendo excursiones y actividades y un sinfín de locales y restaurantes.

Excursiones a las afueras de Lagos



La Ruta de los Siete Valles Colgantes

¡LA EXCURSIÓN IMPRESCINDIBLE!

Había leído sobre esta ruta considerado como uno de los paseos más bonitos del Algarve y, como no me fiaba mucho de hacer este recorrido sola (visto mis antecedentes con lo de perderme en parajes naturales), decidí contratar una excursión desde Lagos para hacerla. ¡Y mereció mucho la pena!

El camino es relativamente fácil (eso, sí, es recomendable llevar buen calzado), pero fue buena idea ir con la excursión guiada ya que en muchos lugares la señalización no es muy clara y puede que, en vez de caminar los 6 km, acabes caminando 15 (y visto mis antecedentes haciendo el Camino portugués…)

Nuestro recorrido empezó Playa de Marinha y, como podéis ver, en las primeras fotos, el calor hizo que se levantara niebla, pero, aun así, los paisajes nos dejaban a todos boquiabiertos. Si los arcos de Ponte da Piedade (ver más arriba) eran impresionantes, aquí la altura es aún más vertiginosa. Más o menos, a medio camino podemos asomarnos al Algar de Benagil, la famosa cueva, pero desde arriba y, tras otros 15 minutos de caminata, llegamos a la playa de Benagil, en la que se alquilan kayaks para poder acceder a la cueva. ¡Sólo diré que nunca había visto tantos kayaks juntos!

Con la excursión se hace un pequeño descanso ahí antes de seguir con la otra mitad del recorrido (como podéis ver el ritmo fue muy relajado).

A continuación, pasaríamos por la Playa do Carvalho y entonces el sol empezó a aparecer para el final del recorrido a pie que en nuestro caso seguiría hasta el Faro de Alfanzina.

Desde allí, tras otro breve descanso, nos trasladarían hasta la Praia do Vale de Centeanes (donde acaba el sendero), para ya recorrer durante la tarde los 7 Valles Colgantes… ¡Desde el agua!

Con una pequeña lancha a toda velocidad, estuvimos toda la tarde ya con los chalecos puestos (spoiler: acabaríamos empapados) para ver los acantilados por los que habíamos caminado esta vez desde abajo.

Evidentemente, pudimos entrar en alguna cueva incluso acercarnos a la entrada de la cueva de Benagil donde cientos de turistas se jugaban el tipo entrando con su kayak para sacarse LA foto desde este emblemático lugar.

Sagres y Cabo San Vicente

Sagres, el pueblo surfero
Sagres, el pueblo surfero

Si viajas al Algarve sin coche, una de las excursiones que puedes hacer sin problema en bus es ir a Sagres. Se tarda una hora y cuarto en llegar y apenas cuesta unos tres euros por trayecto.

Sagres es un diminuta freguesía de unos 2000 habitantes. Podrás pasear por su fortaleza de la que apenas quedan unos bastiones pero que tienen unas vistas impresionantes a unos acantilados. Dentro del recinto además hay un faro.

Si dispones de tiempo o haces noche en Sagres, otro de las mayores atracciones es recorrer la Ruta Vicentina, una ruta de senderismo pegada al mar que va de Sagres hasta el Cabo de San Vicente y su faro (unos 12 km ida y vuelta).

Pero, Sagres se ha vuelto muy popular estos últimos años por ser un pueblo surfero. La Praia da Mareta es más tranquila, pero la Praia del Tonel es una de las preferidas para los surfistas.

Ferragudo y Portimao

Finalmente, a pesar de que Carvoeiro es uno de los pueblos más elogiados de esta zona del Algarve, fue imposible encontrar forma de llegar hasta allí sin coche.

Así que decidí ir hasta Ferragudo ya que hay un tren que une este pueblo con Lagos. Se tarda aproximadamente media hora y luego, si os perdéis un poco como yo, llegaré en otros 30 minutos hasta la bonita Praia do Pintadinho.

Mi idea era pasear todo lo largo de mar, pero en este caso, es imposible ya que el acceso al mar en esta zona es exclusivo para todas las mansiones de la zona. Así que tuve que deshacer el camino, pasear por una “carretera”, hasta llegar a Praia Grande.

Desde Praia Grande ya pude alcanzar el Castelo de Sao Joao do Arade y llegar el pequeño pueblo de pescadores que es Ferragudo. A pesar de haber convertido también en un destino de Instagramers, tuve suerte de poder pasear tranquilamente por esta freguesía de apenas 2000 habitantes y tras una horita, tomaba una pequeña embarcación a motor (Taxiferry) que me permitiría cruzar a Portimao por unos 5 euros.

Taxi ferrys que conectan Ferragudo y Portimao
Taxi ferrys que conectan Ferragudo y Portimao

Portimao es una ciudad más imponente.

Se nota que es un puerto pesquero potente, que cuenta con una importante industria conservera y un enorme puerto deportivo que atrae a turistas de todo el mundo que vienen a disfrutar de las playas da Rocha, dos Tres Castelos, dos Careanos, do Vau, de los Tres Hermanos y de Alvor.

Su casco histórico aún conserva cierto encanto. Te recomiendo ir a la Fortaleza de Santa Catarina para disfrutar de la panorámica sobre el mar.

Qué comer en el Algarve



Al igual que ocurre en todo Portugal, el pescado y los mariscos son las estrellas de la gastronomía local.

Sin embargo, en el Algarve hay dos platos que no puedes dejar de probar que son específicamente del Sur de Portugal.

La Cataplana: la cataplana es una curiosa cazuela metálica con tapa que recuerda un bivalvo y permite la cocción de los alimentos en modo tajín. Existen un sinfín de platos que se pueden preparar en ella, pero destacan las mezclas de mariscos y carne de cerdo.

El Pastel de Algarroba: el algorroba es el fruto del algarrobo, una planta que crece muchísimo en la zona del Algarve. Con una forma muy similar a una judía, al secarla, se extrae de ella un polvo muy similar al cacao. La tarta de algarroba del Algarve es bastante potente ya que a ese sabor chocolateado se le suma la almendra, la azúcar y el huevo.

¿Lagos o Faro?



No es un respuesta fácil si deseas conocer el Algarve sin coche. Lo cierto es que las dos ciudades y las actividades alrededor de cada cual son bastante diferentes. Lo ideal es utilizar ambas ciudades de epicentro para luego explorar la zona.

Lagos es una ciudad actualmente más moderna y se ha convertido en un lugar más económico en el que alojarse, lo que conlleva que sea mucho más turística.

Faro me pareció una ciudad más auténtica, pero con más esencia y encanto. Las playas y los paisajes no son tan espectaculares, pero se trata de un lugar perfecto para la slow life y una vida mucho más hippy.

Personalmente, me gustó poder dedicarle tiempo a ambas para ver las dos caras del Algarve.

Artículos relacionados



Deja una respuesta